2019: AVALANCHA DE PROMESAS INCUMPLIDAS… Y 6º AUMENTO DE SUELDO DEL PRESIDENTE
Buenos días a tod@s,
Como algun@s ya sabéis, el pasado viernes, la actual directiva del Levante UD convocó la Junta General de Accionistas, lugar en el que debe dar las explicaciones oportunas sobre la gestión llevada a cabo estos últimos doce meses y en el que se adoptarán las decisiones que seguirán marcando el futuro de nuestro club.
Como tristemente era de esperar, la promesa realizada públicamente en diciembre de 2016 por el actual presidente, Quico Catalán – “Quiero que en 3 años las acciones de la Fundación estén en manos de los abonados”-, no se ha cumplido, y lo que entonces sirvió para intentar justificar y relativizar los movimientos dirigidos a controlar absolutamente la mayoría accionarial del club sin poner un euro, hoy queda evidenciado como una nueva (otra más) falta de palabra de un presidente que ha normalizado el incumplimiento de la misma sin rubor alguno.
Hace 3 años, en la Fundación, apenas se hablaba con la boca pequeña de mantener la mayoría accionarial del club en la misma, e incluso Quico Catalán afirmaba su deseo, como máximo, de conservar “un pequeño paquete de control” que no tenía “por qué superar el 50%”, podía ser “de un 20%, 30%…”.
Hoy, ya nadie, al margen del FROG, cuestiona dentro de la Fundación una realidad que contraviene el objetivo principal del nacimiento de la misma, que era ser una mera herramienta de transmisión de los títulos a los levantinistas, no el regalar a un reducido grupo de personas el control absoluto del club decano del fútbol valenciano.
Pero los hechos son los que son, y ahora mismo, los actuales gestores de Fundación y club han aparcado los motivos que dieron origen a la actual estructura y la han consolidado como inamovible, olvidando la voluntad democratizadora que definió de salida la operación, y limitando de manera peligrosamente grave la transparencia, la necesaria vigilancia, la crítica y la observación de la gestión real del Levante UD.
Todo ello deviene en una realidad más preocupante cuando se analiza en profundidad el presente 2019, año, no lo olvidemos, en el que Catalán ha faltado a su palabra, dada públicamente hasta la saciedad, de no aferrarse públicamente al cargo.
Para desviar la atención de ello, la directiva nos obsequió, en la pasada Junta General, con la filtración interesada a un medio de comunicación afín, apenas dos horas antes del inicio de la misma, de un video de lo que, supuestamente hoy, iba a ser ya el nuevo Ciutat de València. Como bien sabéis todos, nada más lejos de la realidad. Del famoso nuevo estadio que el levantinismo debía estar disfrutando desde el pasado 9 de septiembre, apenas han comenzado las obras. Y de la esperada cubierta, a día de hoy, nada de nada.
Lo mismo sucede con las obras de la futura Ciudad Deportiva de Nazaret, cuya promesa inicial era comenzar en abril de este año que acaba. Después, en diciembre. Hoy, quién sabe. El argumento, que el retraso responde a temas ajenos al Levante UD. Otra media verdad, dado que, como bien sabe la directiva, el proyecto presentado no ha sido aprobado por necesitar modificaciones que deben acometerse, más allá del ok definitivo al Plan Parcial de actuación sobre la zona.
Pese a todo lo anterior, motivos sobradamente suficientes como para estar bien lejos de sacar pecho, la actual directiva acaba de aprobar el sexto aumento de sueldo de su presidente, que ya ha multiplicado por 4 el salario de más de 60.000 euros anuales con el que comenzó hace una década.
La ausencia del (también públicamente prometido hace años) salto de calidad del equipo, la recuperación de un amigo personal del presidente para liderar la dirección deportiva (sin un solo éxito desde que abandonase el Levante UD por haber, en palabras de Catalán, “dejado de ser Manolo Salvador”) y las dudas sobre la idoneidad de una gestión económica que ha llevado al límite salarial al club (imposibilitando pagar esta temporada las mejoras de los nuevos contratos de Aitor Fernández y Paco López, y obligando a vender jugadores antes del próximo 30 de junio por un valor de 17,67 millones de euros) son otros temas que invitan, como mínimo, a la mayor de las cautelas.
Por ello, porque es fundamental que los levantinistas sigamos atentos y haciendo las preguntas, te pedimos que delegues tus acciones en el FROG (es muy sencillo, puedes hacerlo en dos simples pasos). Como sabes, se trata de una delegación puntual, solo para votar unidos en la próxima Junta (las acciones siguen siendo tuyas y mantienes tus derechos, como el descuento en el pase). No es un tema menor, aunque tengas una o dos acciones. Tu apoyo, no lo olvides, es el que nos da voz, el que permite la supervivencia de opiniones independientes.
A tod@s los que año tras año confiáis en nosotros, muchas gracias. Intentaremos, de corazón, estar a la altura. Un abrazo fuerte.
Carlos Ayats