El FROG – Asociación de Accionistas del Levante UD, que representó anoche a los 390 accionistas del Levante UD que le delegaron su voto en la Junta General de Accionistas del Levante UD, manifestó abiertamente su disconformidad con el momento, la justificación y las cantidades del aumento de salario de Quico Catalán, que pasará de cobrar 229.000 euros al año a asegurarse un mínimo de medio millón de euros anuales por cada permanencia del primer equipo masculino en Primera División.
Tras un panegírico de 27 minutos alabando las bondades del presidente por parte del directivo Braulio Pastor, el FROG tomó la palabra para cuestionar los argumentos ofrecidos. Tomás Pérez acusó a la directiva de ser “ultraconservadores con los objetivos planteados”.
Complementos salariales disfrazados de objetivos
“Con el 12º límite salarial del campeonato”, afirmó Tomás Pérez, “la permanencia es una obligación. No es razonable premiarla con 100.000 euros. En cuanto al bonus de 50.000 euros más por un EBITDA superior al 7%, teniendo en cuenta que el director financiero asegura que va a ser de dos dígitos en los próximos años, se está premiando por algo ya conseguido. Son objetivos excesivamente conservadores, que perfectamente pueden confundirse con complementos salariales asegurados”.
Un informe oculto… ¿realizado por consultoras externas o los propios directivos?
Posteriormente, Carlos Ayats, presidente del FROG, criticó las formas y la nula trasparencia de la directiva granota en este tema. “Para empezar, aquí no se decide nada”, señaló Ayats, “porque el aumento de sueldo ya está aprobado desde el día 5 por el Patronato de la Fundación, poseedor de la mayoría accionarial del club”.
“Además”, prosiguió, “dicha aprobación se llevó a cabo pese a la negativa de la directiva a mostrar el informe en el que se basaba esta decisión a los propios patronos. Dicho informe, según dijo Luis Calero en aquella reunión, había sido realizado, y cito textualmente, por varios consejeros. Hoy (por anoche), se nos dice que ha sido llevado a cabo por consultoras externas e independientes”.
Ayats recuerda que el club ha ingresado, esta década, más de 250 millones de euros en derechos de TV
Así mismo, Ayats reprochó a Pastor que, en su exposición, obviara “los más de 250 millones de euros que ha percibido el club, esta década, en concepto de derechos de TV. Desde su llegada, Quico Catalán ha reducido la deuda en 50 millones, que es lo mismo que el Levante va a cobrar, solo este año, por ese concepto”.
Por otro lado, el presidente del FROG lamentó la comparación del sueldo del presidente del Levante con el de La Liga, Javier Tebas, así como que el Consejo se haya dirigido al propio Tebas “amigo personal de Quico, para preguntarle cuánto debían pagarle”.
“Todo, encima, el año de las promesas incumplidas de la cubierta del estadio y el inicio de las obras de la nueva ciudad deportiva de Nazaret, entre muchas otras. Por todo ello, este aumento está completamente fuera de lugar y muy mal justificado”.
Promoverá una votación sobre los patrocinios de casas de apuestas
En palabras de su presidente, el FROG advirtió, a su vez, de la “incoherencia de luchar contra la ludopatía en la escuela y llevar el logo de BetWay en el pecho”, y anunció la intención del FROG de buscar los apoyos necesarios para someter a votación, entre los accionistas, si debe romperse cualquier vínculo económico con las casas de apuestas.
Junto con el tema de las apuestas, Ayats le recordó al Consejo que llevan años solicitando “la prohibición de fumar en el estadio del Club de los Niños”, algo que el presidente del club, Quico Catalán, se comprometió a llevar a cabo de cara a la próxima temporada.
Las disculpas de Catalán
Por último, cabe destacar que, tras la solicitud realizada y argumentada por el FROG la semana pasada, el Consejo aceptó votar por separado la modificación de los estatutos y el nuevo sueldo de Catalán, quien pidió “disculpas” por no haber llevado a cabo en el tiempo anunciado la obra de la cubierta, si bien dijo “no considerarlo una promesa incumplida”.
A este respecto, Ayats le respondió agradeciéndole sus disculpas, al tiempo que, en todo caso, le solicitó que, “en el futuro, tanto usted como su Consejo se abstengan de comprometerse a lo que no saben si podrán cumplir”.