17 páginas. La primera, con la portada; la segunda, con el índice; la tercera, con la introducción; otra, con las conclusiones, gráficos ocupando páginas completas… Vamos, el típico trabajo del colegio que se hincha cuando no se ha hecho ni el huevo para mendigar un aprobado.
Ese es el ‘informe’ en el que, supuestamente, se ha basado el Consejo de Administración para ‘proponer’ la ya aprobada multiplicación del salario del actual presidente del Levante UD, Quico Catalán, que este año, si el primer equipo masculino logra la permanencia, se embolsará, como mínimo, medio millón de euros de sueldo.
Reconoce, abiertamente, desconocer las cifras en que se basa la comparativa
De las 17 páginas, 12 son un análisis de la evolución económica del club entre las temporadas 11-12 y 17-18, y apenas 2 y media están destinadas a la “valoración de la remuneración del cargo de presidente del club”.
En estas últimas, pueden leerse perlas como: “A pesar de la Ley de Transparencia, no se conocen los sueldos directos de los presidentes o más altos ejecutivos ya que, habitualmente, se encuentran camuflados dentro de los ‘gastos de personal no deportivo’ o dentro de ‘alta dirección’”.
Es decir, que además de acusar al resto de clubes de esconder dichos salarios, se reconoce, abiertamente, que se desconocen las cifras en las que se supone, se basa el citado aumento. Brillante.
En todo caso, en una extraordinaria muestra más de coherencia, en un párrafo posterior, se afirma que los datos desconocidos “en la Liga sí se conocen”, y se indica que “los altos directivos tienen sueldos, según se ha podido saber” (¿?), “pero sin confirmación oficial” (sic), “con un tope de alrededor de 1,2 millones de euros en las escalas más altas”.
Datos sin contrastar vs datos conocidos
“En cuanto a los clubes medianos”, prosigue, “los sueldos están por encima de la remuneración actual del presidente, sobre 400.000 euros”. Sobre dicha cifra, al margen del ‘clarividente’ “en la Liga sí se conocen”, no se aporta dato o fuente alguna.
En este punto, es pertinente apuntar la información aportada por la Cadena COPE Valencia al respecto, señalando las cifras que la emisora ha sido capaz de obtener: Éibar (150.000 € / año), Espanyol (200.000 € / año), Osasuna (450.000 € / año en caso de permanencia en Primera), Huesca (130.000 € / año, datos de la 18/19) y Betis (242.000 € / año).
La media de estos datos obtenidos es de 234.000 € / año, cifra mucho más acorde a los 229.000 € / año que venía percibiendo Catalán que a los 500.000 € / año que, como mínimo, se embolsará ahora.
Evitar una oferta de un club superior, supuesto objetivo
“No interesa contemplar los clubes con presupuestos más bajos”, añade el ‘informe’, “por entender que ese no es el objetivo de este informe, sino que es valorar que el presidente pueda tener una mejor oferta, por lo tanto, de un club de categoría superior”.
El argumento, curiosamente, es idéntico al empleado por los afines al Sr. Tebas (entre los que se encuentra el propio Quico Catalán) para justificar que el actual presidente de la Liga -que accedió al cargo criticando el salario de su predecesor, José Luis Astiazarán, inferior a los 400.000 €- haya disparado su salario hasta los 1,2 millones de euros más bonus, tal y como indica el propio Informe Catalán, que añade que el bonus, de 0’25 millones, es “casi imposible de fallar” (sic).
Los estándares de mercado de empresas comparables
En la modificación del artículo 15 de los Estatutos Sociales del Levante UD, promovida con el fin de ‘adecuar’ el salario del presidente y aprobada en la pasada Junta General de Accionistas, se especifica que “la remuneración de los consejeros con facultades ejecutivas deberá en todo caso guardar una proporción razonable con la importancia de la sociedad, la situación económica que tuviera en cada momento y los estándares de mercado de empresas comparables”.
En este punto, es especialmente lamentable la aportación del ‘informe’ en cuanto a los estándares de mercado de empresas comparables. No en vano, al margen de la afirmación, de dudosa procedencia y sin posibilidad de corroboración alguna, de que “en los clubes medianos los sueldos están sobre los 400.000 euros”, no se aporta NI UNA SOLA CIFRA de lo que gana hoy en día un ejecutivo de NINGÚN CLUB actual de Primera División. Ni del último lustro. Ni una.
De hecho, en las citadas 2 páginas y media, únicamente se habla del salario de Tebas (obviamente, perteneciente a una empresa no comparable), y de los sueldos de Augusto César Lendoiro, presidente del Real Club Deportivo de la Coruña entre 1988 y 2014, y Paco Roig, máximo mandatario del Valencia Club de Fútbol entre 1994 y 1997, referencias de hace décadas y que, obviamente, no pueden ser consideradas como estándar alguno de “empresas comparables”.
Y hasta aquí los argumentos del ‘informe’ para justificar la decisión de multiplicar el sueldo de Catalán. Es más, por no aparecer en el ‘informe’, ni tan siquiera aparecen los datos argumentados por el directivo del Levante Luis Calero en el Patronato de la Fundación Levante UD Cent Anys del 5 de diciembre de 2019, en su defensa del citado aumento, referentes a la Segunda División española, mientras que, los referentes a la Primera División, han sido rebajados. ¿No es el mismo ‘informe’?, ¿ha sido éste modificado?, ¿por qué motivo?
Una intrahistoria más que sospechosa
Y es que el famoso ‘informe’ tiene una intrahistoria muy alejada de la transparencia de la que presume (solo de palabra, porque los hechos son de una opacidad contundente) el Levante UD.
Para empezar, tal y como ya denunció públicamente el FROG después del Patronato del 5 de diciembre, los patronos, es decir, los dirigentes del teóricamente independiente propietario de la mayoría accionarial del Levante UD SAD, aprobaron la multiplicación del salario de Catalán sin que les fuese ni siquiera permitido leer el supuesto ‘informe’.
“No estoy autorizado a mostrarlo”, respondió el Sr. Calero a la petición del FROG, previa a la votación que decidiría la aceptación del aumento. Tan increíble como cierto. Excepto el FROG, por cierto, ni uno solo de los patronos restantes puso objeción alguna a aprobar el nuevo salario sin tener acceso al supuesto ‘informe’.
Con la aprobación del nuevo salario ya decidida por el ok del máximo accionista, en la Junta General de Accionistas del pasado 16 de diciembre, el directivo Braulio Pastor, principal impulsor del famoso ‘informe’, realizó una defensa de la multiplicación salarial con una intervención panegírica sobre las bondades del presidente Catalán, amigo personal de Pastor, obviando sus múltiples promesas incumplidas durante el mismo 2019 (su múltiples veces anunciada decisión de abandonar el cargo, la cubierta del estadio, el inicio de las obras de la Ciudad Deportiva de Nazaret, etc.) y sin mostrar una vez más el supuesto ‘informe’ que, según afirmó estaría “a disposición de cualquier accionista que lo solicitase”.
Tras contestarle lo evidente en la Junta al Sr. Pastor -es decir, que los informes se ofrecen antes de las votaciones, no después- procedimos a solicitar, al día siguiente a la celebración de la Junta General -en concreto, el 17 de diciembre, a las 19.18 horas-, que nos fuese facilitado el famoso ‘informe’.
Más de dos meses de espera…
Para nuestra sorpresa (o quizás no tanta…), el documento solicitado no solo no llegaba, sino que ni siquiera había respuesta. Han tenido que pasar más de dos meses, y ser necesario insistir en la petición en calidad de patronos de la Fundación, para que, el pasado 19 de febrero, recibiéramos respuesta a nuestro correo electrónico del secretario del Consejo, Jorge Lucas, señalando que el documento estaba a nuestra disposición en las oficinas del club. Dos meses para una línea de respuesta (o para ‘darle forma’ al documento, ¿quién sabe?).
El pasado lunes, acompañado en todo momento por personal del club, tuve acceso al ‘informe’ citado, del que, en una muestra más de la ‘transparencia’ existente, no se permite tomar fotografía alguna. El resultado de la lectura del mismo no pudo ser más decepcionante y clarificador.
“El informe de Braulio”
En resumen, que la multiplicación del salario de Quico Catalán ha sido aprobada en base a un ‘informe’ (el “informe de Braulio” en la jerga interna del club, aunque oficialmente esté firmado por los despachos Ruiz-Huerta y Crespo y GRA Asesores, Abogados y Auditores) negado a quienes debían tomar la decisión y, como mínimo, modificado y escondido durante los meses posteriores a la aprobación del aumento.
Con todo, lo grave no es que Catalán cobre 66.000, 229.000 o más de medio millón de euros, lo preocupante es que, al margen del FROG, ningún patrono de la Fundación Levante UD Cent Anys -recordemos, con responsabilidad sobre la gestión del club- haya alzado la voz sobre este tipo de conductas, que obviamente, no dejan en buen lugar a la estructura de poder reinante en el Levante UD.
Carlos Ayats (Presidente del FROG – Asociación de Accionistas del Levante UD SAD)